“No se puede poner a competir a la tributaria con el plebiscito”

“No se puede poner a competir a la reforma tributaria con el plebiscito”


Entrevista de La República a Bruce Mac Master


En medio del álgido debate que ha generado la discusión de una futura reforma tributaria, encabezado por las recomendaciones de la Comisión de Expertos y por las fluctuaciones económicas, el sector empresarial fijó su posición al pedirle al Ejecutivo que reconsidere presentarla al Congreso lo antes posible.


En Inside LR, Bruce Mac Master, presidente de la Andi (Asociación Nacional de Industriales), comentó que no se puede, de ninguna forma, poner a competir a la tributaria con el plebiscito para la paz. Y que, a pesar de las reacciones negativas, el aumento del IVA es necesario.


¿Qué se ganó con el compromiso de la presentación de la reforma tributaria? Entraría en vigencia en 2017, ¿no será muy tarde ante las necesidades fiscales del país?

Luego de una serie de aplazamientos, el Presidente nos anunció que no va a entregar un proyecto de reforma en marzo, sino que será para la segunda legislatura del año, en razón de que el Congreso se lo pidió, por la congestión legislativa.


No se debe mezclar el plebiscito con la reforma y quiero ser enfático en eso, en ningún caso se pueden poner a competir. La tributaria es necesaria por varias razones, en 2014 lo fue por motivos competitivos, pero actualmente hay una causa más: estabilidad fiscal, dada la caída de los precios del petróleo. Pienso que el Gobierno debería replantear esa decisión y apresurarla. Me asusta que se aplace el proceso de paz y que el plebiscito se firme cuatro meses después.


¿Cuáles de las propuestas hechas por la Comisión le gustan y cuáles no?

La reforma tributaria, por su naturaleza, es estructural. Debo decir que la Comisión hizo un trabajo juicioso al reunir un paquete completo y coherente. Las personas han reaccionado fuertemente a la propuesta de aumentar el IVA, pero la razón de la comisión para hacerlo es tener la mayor estabilidad fiscal posible. En ese orden de ideas, es una necesidad a pesar de lo doloroso que pueda ser.


Usted resaltó su coincidencia con  Thomas Piketty frente al  impuesto a la riqueza para las empresas, ¿qué otras opciones de recaudo da?

Piketty dijo que ese impuesto es un despropósito, porque las compañías no son ricas ni pobres. Es torpe que se decida incluir un elemento de falta de competitividad al aparato productivo. Allí aparecen alternativas como el impuesto a los dividendos, pero permitamos que nuestras empresas produzcan, generen ingresos y empleos, y luego sí miramos si generan riqueza.


En la ‘Estrategia para una nueva industrialización’, el tributario es apenas uno de los temas. ¿Y las otras propuestas?

En la Andi decidimos hacer más país, dejar de quejarnos y aportar. En ese documento había cerca de 40 propuestas distintas donde miramos la reforma tributaria,  la simplificación trámites, el cuidado del medio ambiente, entre otros. Y hemos tenido una gran cantidad de logros, hacemos un reporte permanente de lo que se cumple y lo que no.


Mientras usted estaba como viceministro de Hacienda se evidenciaron sobrecostos en Reficar. ¿Cómo reaccionó?

Parte del presupuesto inicial de Reficar no consideró un gran monto de los costos que terminaron incluyéndose. Yo no quiero defender a nadie, sí sé que había obras que no estaban contempladas y se terminaron teniendo en cuenta como la Planta de Coque. En Colombia, hay que hacer un ejercicio serio para mirar los sobrecostos.



Un reto de la Ley Zidres es integrar a campesinos en proyectos productivos. ¿Qué acciones se pueden llevar a cabo?

La Ley Zidres es un eslabón de una gran cadena. Colombia tiene que ser uno de los 10 grandes productores del mundo.  ¿Por qué no hemos logrado llenar ese vacío? Hemos identificado varias cosas, entre ellas, la necesidad de hacer preparación de talento humano y el uso excesivo de insumos.


¿Cree que es momento de fortalecer aún más las alianzas público privadas?

Un Gobierno nunca va a tener todos los recursos para desarrollar proyectos de infraestructura a gran escala. Las APP son la mejor forma de hacerlo. Por otro lado, quiero resaltar que Colombia vivió un proceso muy fuerte de enfermedad holandesa y que hay que hacer un esfuerzo de largo aliento para disminuir sus efectos: enfocar los ojos en otros sectores como los servicios, el comercio, la industria y el agro y que estos propósitos se logren de la mejor forma.


El índice de confianza industrial repuntó en diciembre después de cuatro meses. ¿A qué se debe esta situación?

Los industriales son unos optimistas empedernidos. Todos los intentan hacer crecer sus negocios, debido, en gran parte, a la tasa de cambio y a la capacidad del mercado.


Usted ha dicho que se necesitaba la devaluación ¿sigue pensando lo mismo?

Sin duda. El país consumió parte de la revaluación que tuvimos, ahora es tiempo de devaluación. Para nosotros, el dólar ideal es entre $3.200 y $3.300.


El perfil:

Bruce Mac Master es economista de la Universidad de los Andes. Fundó Inverlink, una de las bancas de inversión más importantes del país y luego, en el sector de infraestructura, se encargó de la estructuración técnica y financiera de obras como la malla vial del Caribe. Ha sido miembro de las juntas directivas de empresas como Isagén y Bancoldex.  Fue viceministro de Hacienda y desde noviembre de 2013 es el presidente de la Asociación Nacional de Industriales (Andi).


La opinión


Alfredo Rangel

Senador de la república

“El Gobierno debería escuchar la voz de los empresarios. La reforma tributaria es una urgencia debido a la crisis de las finanzas públicas que vive actualmente el país”.




Espero el debate en Twitter. @brucemacmaster

BRUCE MAC MASTER

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